domingo, octubre 19, 2025

Territorio de arcilla

 


Mis manos conocen
la textura del barro húmedo,
la resistencia tibia
de la tierra que cede.

Hay algo en mí
que se reconoce
en el peso del lodo,
en la densidad oscura
del humus recién removido.

Cuando camino descalza
mis pies hablan el mismo idioma
que las raíces profundas,
mi cuerpo es extensión del suelo
que me sostiene.

Mi respiración
se vuelve más lenta,
mi pulso
se sincroniza
con el latido subterráneo
de los gusanos.

Soy hija de la gravedad,
del peso que atrae,
de la fuerza que ancla
las semillas a la oscuridad
hasta que aprenden
a buscar la luz.

En mis venas
corre savia espesa.
En mis huesos
se acumula el mineral
de todas las tormentas.

© Annie Altamirano

Publicado en: Bajo la sombra de los vencejos

XXVIII Encuentro de Poetas Iberoamericanos

Antología en homenaje a Carmen Martín Gaite 1925-2000, Gabriel Chávez Casazola y Carlos Aganzo

Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes

Quietud y vuelo

 


En la quietud de la raíz
habito,
en su abrazo oscuro
donde el tiempo no corre.
Soy piedra inmóvil,
aliento atrapado en el vientre del suelo,
una promesa que germina
sin romper el silencio.

Y el vuelo me llama,
con su vértigo de horizontes,
con su danza incierta sobre el abismo.
El aire me tienta,
me tiñe de luz y de vacío,
me dice que el peso no es eterno,
que en lo alto también se puede habitar.

Entre la raíz y el vuelo
mi ser oscila:
¿quedarme en lo profundo,
o perderme en lo alto?
Soy la duda del viento,
el anhelo del suelo,
la hoja que tiembla en la rama,
suspendida entre la quietud y el salto.

© Annie Altamirano

Publicado en: Bajo la sombra de los vencejos

XXVIII Encuentro de Poetas Iberoamericanos

Antología en homenaje a Carmen Martín Gaite 1925-2000, Gabriel Chávez Casazola y Carlos Aganzo

Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes


Territorio de arcilla

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